¿Por qué la cachetada de Will Smith ha dividido tanto la opinión pública?
Nosce Te Ipsum por: Josman Espinosa Gómez
Tal vez no sea alguien que vea la televisión como mucha gente, pero si estás viviendo en este mundo, seguramente te enteraste de alguna forma, de la famosa y ahora histórica cachetada que el actor Will Smith le dio al comediante Chris Rock en la pasada entrega del Oscar el domingo por la noche. Hemos visto, leído, comentado hasta cansarnos seguramente tantas opiniones como réplicas al respecto desde diferentes puntos de vista y cada uno de ellos debe ser respetado y seguramente muchos tendrán un sinnúmero de argumentos por demás válidos. Nos convertimos en expertos de opinión desde el mundo de la farándula hasta los derechos humanos, pasando por temas de género, racismo, feminismo, masculinidades, patriarcado y hasta comedia, entre otros.
No quisiera redundar sobre los temas obvios a discutir con este hecho, sin lugar a dudas la violencia desde cualquier presentación está mal, ya sea la verbal y pasiva disfrazada de chiste, hasta la evidentemente física como una respuesta impulsiva de manera emocional; la discusión sobre desmontar estos espectáculos que fomentan el ejemplo de la masculinidad patriarcal donde la violencia se convierte todavía hoy para muchos en un mecanismo de reafirmación de la virilidad y hasta de restauración del honor supuestamente perdido; pero todavía más preocupante la sociedad cómplice de todo este espectáculo que se rinde ante una disculpa y no asume el rol denunciante que necesitamos para que esto cambie.
Este hecho debe de seguir siendo una llamada de atención a la sociedad en general y que sirva como un ejemplo pedagógico, que fomente el denunciar nuestro desacuerdo con estos comportamientos, pero más con las instituciones y espacios que lo provocan. La entrega de los Oscar nunca ha dejado de ser un ejercicio que invita al análisis social de nuestra época, este año se premió como mejor actor al rol de un padre explotador del talento de sus hijas, en un marco de una agresión física entre hombres para salvar el honor de una mujer. ¿Irónico? ¿Contradictorio?
Es el mundo que vivimos, un mundo que se jacta de evolucionar hacia un mundo mejor para todos, pero que sigue sosteniendo sus mecanismos de control con esta clase de mensajes. Lo valioso de estos hechos, no es lo que vemos en el momento en una transmisión a nivel internacional, sino las reacciones y acciones que asumimos después de ello. No me ha tocado leer muchas reacciones sobre la relevancia que tiene la salud mental en estos casos, o de los problemas de salud mental por los que ha pasado este mismo personaje y que hoy no dejan de ser un factor que pueda impactar en su conducta, siempre es más fácil analizar las reacciones y consecuencias, pero lo que lo provoca, llámese sociedad y contexto, es muy raro que lo revisemos. De aquí mi invitación a reflexionar a lo que le vamos a seguir aplaudiendo ¿a hechos montados en un espectáculo que siguen mandando mensajes confusos? ¿a la sociedad cómplice de dinámicas que siguen reforzando una manera de seguir haciendo las cosas? o ¿a cada uno de nosotros que juzgamos, criticamos, aplaudimos y seguimos sin hacer mucho en nuestros propios espacios para condenar estas conductas y cambiar las cosas? Tristemente, es que cada uno de nosotros que hemos opinado sobre este tema en estos días, hemos podido comprender las acciones, tal vez hasta justificar los hechos, pero pocos hemos podido reconocer que todos tenemos un Will Smith y un Chris Rock dentro de nosotros, y hasta que esto no pase, las cosas seguirán igual por mucho tiempo ¿o no?
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