EL BENEFICIO DE SER AGRADECIDO
- Por: Josman Espinosa Gómez
“Tal vez la gratitud no sea la virtud más importante, pero sí es la madre de todas las demás.”
-Marco Tulio Cicerón-
Estamos por concluir un año más, y como cada año, se viene un recuento de las cosas que hicimos y dejamos de hacer. Tenemos esa mala costumbre de enfocarnos más en lo malo que nos pasó y lo que no logramos por lo que quizás es momento de repensar esta actitud y para ello, me gustaría compartir algunas reflexiones y sugerencias.
¿Cómo percibes tu propia vida? ¿Alcanzas a reconocer todo lo bueno que tienes y has logrado en ella? ¿Qué es lo realmente valioso para ti?
Aprende a ver el mundo de otros y valora lo que tienes en función de reconocer que, así como hay personas que tal vez tienen mucho o han logrado más cosas, también hay gente que no tiene ni ha logrado lo mismo que tú.
Piensa en todo lo malo que te ha sucedido y reflexiona sobre lo peor que pudo haber sido en algún momento y siéntete afortunado porque no fue algo mayor.
Es fundamental reeducarnos para aprender a pensar en positivo y ver todo lo bueno que vivimos cada día. Nos pasan cosas demasiado buenas empezando por el hecho de estar vivos para poder seguir disfrutando de todo.
¿Sabes que la eficacia de la gratitud está comprobada científicamente? Cuando eres una persona agradecida tu mente se enfoca en lo que tienes y no en lo que te falta; te permite vivir en el aquí y el ahora. Además, ser agradecido beneficia a otros, ya que una persona agradecida no sólo es más feliz, sino que también esparce esa actitud a su alrededor en cada momento que da las gracias a otros fortaleciendo las relaciones y haciendo que las personas quieran estar contigo.
Las personas agradecidas desarrollan una tendencia a ver el lado positivo de las cosas, por lo que les es posible mantener una actitud positiva a la vez que les permite acceder a un lado oculto del mundo que la mayoría de las personas no ven. En pocas palabras, la vida es un milagro que solo puedes ver cuando te pones los lentes del agradecimiento.
El entorno en el que vivimos ayuda o inhibe nuestra capacidad de agradecimiento. Ya lo dice el viejo refrán: dime con quién andas y te diré quién eres. Por ello lo mejor es rodearse de gente agradecida y positiva. El agradecimiento se contagia así que pueden empezar tú mismo el cambio entre aquellos que te rodean.
El agradecimiento es una cualidad que todos podemos desarrollar. Puedes empezar por registrar todo aquello por lo que agradeces al final del día: por tener un hogar, por haber saciado el hambre, por contar con un trabajo, por cualquier pequeño logro. Verás cómo día tras día encuentras más razones para agradecer y en menos de lo que piensas el agradecimiento será un hábito.
Es preciso aclarar que no se trata de dejar de ver lo malo y las cosas que no nos favorecen, sino de hacer un énfasis en lo que es positivo, en lo que sí tenemos hoy, en los pequeños pasos que vamos dando y agradecer por la posibilidad, la voluntad y el resultado.
Intenta por unos días agradecer por todo lo que tienes y te pasa cada veinticuatro horas y después reflexiona cómo te sientes al respecto. ¿Crees que valga la pena iniciar el nuevo año con este nuevo hábito? Ojalá que sí.
¡Felices fiestas y que sea un año lleno de éxito y agradecimiento por ello!
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Agradecido
