Morelia, Michoacán. 21 de septiembre de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- Verónica Montes de Oca Zavala, profesora del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), miembro nivel II del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y autora del libro Redes transnacionales, migración y envejecimiento, ofreció recientemente la conferencia Migración y envejecimiento, en el marco del Seminario “Identidad, cultura y sociedad” organizado por la Unidad de Investigaciones sobre Representaciones Culturales y Sociales (UDIR).

Montes de Oca ha analizado el impacto de la migración en la salud y en la calidad de vida de las personas adultas mayores en Estados Unidos y México, así como la repercusión de las condiciones laborales del migrante y de sus familiares en la vejez.

Durante su intervención, ella relató la metodología de su investigación, que implicó viajar desde Ocampo, Guanajuato, a Oak Cliff en Dallas, Texas, acompañando grupos de migrantes en autobuses.

Esta investigación fue binacional en conjunto con las universidades de College Station en Texas y el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM.

Realizamos trabajo de campo en algunas zonas de Guanajuato, Zacatecas, Texas, Illinois y California y consultamos diferentes fuentes de información, como la Encuesta Nacional sobre Salud y Envejecimiento de México (Enasem). Estos estados, junto con Michoacán y Jalisco, representan una zona de tradición en migración en donde las repercusiones de esta se pueden observar con más claridad.

Nos encontramos que en Estados Unidos se presenta un proceso más acelerado de envejecimiento que en México, en donde actualmente hay 57 millones de personas de más de sesenta años, de las cuales 4.2 millones son latinos y 2.2 millones son mexicanos. Mientras que en México, la población con 60 años y más representa de 10 a 12 millones.

Además, hay un descenso más acelerado de la fecundidad en el país vecino, por lo que la población hispana representa un bono demográfico, dado que tienen mayor número de hijos y pueden revitalizar el futuro económico de esa nación.

Analizamos cómo se tejen redes trasnacionales de cuidado para los adultos mayores, en donde los parientes cercanos de los migrantes juegan un papel importante cuando los hijos se encuentran en el extranjero. Se crean estrategias para mantener la calidad de vida en la vejez, como la contratación de personas para su cuidado, el envío de remesas para el pago de casas de asistencia o para el cuidado de la salud en casa.

En contraparte, están los adultos mayores norteamericanos y canadienses que vienen a México y se establecen en pequeños poblados como Ajijic en Jalisco, Pátzcuaro en Michoacán o El Rosarito en Baja California, escogen estos lugares por su clima agradable y porque el costo de la vida es bajo en comparación con su país, por lo que pueden adquirir una casa cerca del mar y con toda clase de servicios. Además, los servicios de salud también les son accesibles tanto en México como en Estados Unidos.

¿Cuál es la situación de los adultos mayores en México y en Estados Unidos?

Hay muchos casos diferentes, dependiendo de los recursos económicos y la posibilidad de acceso a la salud.

Se podría pensar que los adultos mayores son únicamente receptores de cuidados y quienes necesitan el apoyo familiar, pero la deportación y la migración ha formado las que se conocen como “familias dona” (en donde hace falta la generación de en medio), en donde los abuelos crían a los nietos y juegan un papel fundamental.

En no pocos casos los adultos mayores se convierten en cuidadores de sus hijos enfermos o de otros familiares. Cuando se encuentran en Estados Unidos se encargan de mantener el cuidado de la casa mientras los migrantes trabajan, es decir, son personas activas que representan un capital social.

Una vez que ustedes realizan un diagnóstico sobre este tema, ¿tendrían alguna propuesta al respecto?

Creo que es necesario promover políticas públicas que apoyen la reunificación familiar y es urgente parar las deportaciones que están fragmentando la vida de las personas. ¿Qué pasa cuando en Estados Unidos la mamá es deportada y los hijos se quedan con el papá? Se le pidió mucho al presidente (Barack) Obama que cesaran pero han ido en aumento.

En México, es necesario que el gobierno federal y de las entidades federativas realicen programas especiales para los migrantes que están regresando al país, los cuales son muy invisibles y a los que es necesario insertar de vuelta en la sociedad. Es gente muy valiosa. También hay que voltear a ver a la generación llamada “punto cinco”, niños o niñas hijos de migrantes que volvieron a México pero que nacieron en Estados Unidos.

Es necesario valorar a los migrantes no solamente como fuerza de trabajo, sino como capital social para ambos países, generadores de vínculos entre ambas sociedades y como seres humanos que llegan a envejecer.