• El río Lerma se ha contaminado por las descargas de aguas residuales, industriales, desde la cabecera del río y sigue su curso con distintos grados de contaminación.

Ciudad de México. 27 de octubre de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- Si bien el agua es factor determinante para el desarrollo tanto económico, político y social del ser humano, también puede ser una amenaza latente para la población y un “dolor de cabeza” para empresarios y gobernantes. La contaminación del agua puede representar epidemias y enfermedades crónicas, indicó Citlalli Aidee Becerril Tinoco, investigadora del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) adscrita al Centro Interdisciplinario de Estudios Metropolitanos (Centromet). Lerma

La especialista en evaluación del impacto ambiental señaló que en México la contaminación del agua es un problema grave ya que en el país hay 260 sitios clasificados como fuertemente contaminados, más otros tantos que son considerados como contaminados.

Dichos sitios altamente contaminados se localizan principalmente dentro de las cuencas hidrológico-administrativas Aguas del Valle de México, Balsas, Lerma-Santiago-Pacífico, Pacífico-Sur y Península de Baja California, mencionó.

En entrevista la investigadora resaltó algunos de los riesgos latentes, principalmente para las ciudades, al tener altos niveles de agua contaminada. Me parece importante mencionar que todas las ciudades mexicanas tienen diversos grados de contaminación, tanto de los cuerpos de agua superficiales como de sus acuíferos.

Un caso severo es el de Lerma, Estado de México, en donde el río Lerma se ha contaminado por las descargas de aguas residuales, industriales, desde la cabecera del río y sigue su curso con distintos grados de contaminación, a lo largo de la cuenca Lerma-Chapala-Pacífico.

Los principales agentes contaminantes son Desechos domésticos, PET y otros plásticos, materiales derivados de la actividad industrial, residuos sólidos urbanos, los cuales al depositarse en tiraderos de basura generan lixiviados que, a su vez, se infiltran y contaminan los acuíferos, aceites, entre otros.

En 2013, se determinó que 260 sitios están clasificados como fuertemente contaminados en algún indicador, en dos de ellos o en todos, con respecto a un poco más de dos mil 600 sitios de monitoreo.

Cabe resaltar que 260 sitios resultaron evaluados como altamente contaminados; sin embargo, la cifra aumenta con los sitios que en los resultados de los análisis son calificados como “contaminados”. Los sitios altamente contaminados se localizan, principalmente, dentro de las cuencas hidrológico-administrativas Aguas del Valle de México, Balsas, Lerma-Santiago-Pacífico, Pacífico-Sur y Península de Baja California.

Además, algunas de las cuencas con mayor número de sitios calificados como contaminados son Aguas del Valle de México, Balsas, Lerma-Santiago-Pacífico, Pacífico-Sur, Cuencas Centrales del Norte, Noroeste, Pacífico Norte, Península de Baja California y Frontera Sur (en cuanto a SST), por mencionar las más contaminadas.