- Gran número de pacientes pediátricos que intentaron suicidarse provienen de familias no nucleares (ambos padres e hijos).
Guadalajara, 27 Abr (Notimex).- Entre cinco y 10 pacientes en edad pediátrica ingresan por semana al servicio de Urgencias del hospital de Pediatría del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco a causa de un intento suicida, informó la médica adscrita, Angélica Barros Hernández.
“La incidencia va en aumento, es un tema preocupante porque se da tanto en niños en edad escolar como en adolescentes, sobre todo de los 9 a los 15 años de edad. Cada vez son más pequeños los pacientes que ingresamos y aquellos que son reingresados porque no es el primer intento de suicidio”, dijo en un comunicado.
Lamentó que, incluso, hay menores de edad que ya tuvieron hasta cinco intentos de suicidio. Los padres de familia toman medidas al inicio, pero muchas veces dejan de darle seguimiento médico y psicológico a sus hijos y estos presentan un nuevo proceso depresivo que los puede llevar a tomar una decisión definitiva.
“Las acciones son más contundentes en los niños más grandes, pero los que son más pequeños buscan en internet, las redes sociales pueden orillarlos a que hagan muchas cosas en contra de su salud y su propia vida”, señaló.
Explicó que el principal método que eligen estos pacientes es la intoxicación por la ingesta de medicamentos que utilizan los padres o los abuelos, incluso ellos mismos, pero en sobredosis.
La urgencióloga dijo que detrás de muchos de estos casos se esconden problemas familiares fuertes, ante los cuales los niños y jóvenes buscan una suerte de “válvula de escape”.
Añadió que un elemento común entre pacientes pediátricos que intentaron suicidarse está el hecho de que provienen de familias no nucleares (ambos padres e hijos), o que entre los padres haya constantes maltratos.
“Aquí, luego de ser atendidos y regularizados en nuestro servicio, se requiere de un tratamiento multidisciplinario para los pacientes, donde se incluya un abordaje psicológico y psiquiátrico. Si es necesario, hay que internarlo para que reciba medicación y atención inmediata, acorde a su problema”, apuntó.
Barros Hernández recomendó a los padres de familia no desestimar los llamados de atención de sus hijos, porque el suicidio no es sólo una amenaza.
“Una vez que la persona ya lo intentó una vez, existe un 70 por ciento de probabilidades de que lo vuelva a intentar y, en determinado tiempo, consumar su propósito. El IMSS Jalisco cuenta con personal especializado para abordar estos casos”, afirmó.
Suicidio menores.